Garantías ante terceros

El seguro de caución es una modalidad que emite garantías ante un tercero que las solicita.

Las garantías pueden recibir diferentes nombres, aunque en el fondo vienen a ser lo mismo. Según la finalidad a la que se destinan y la denominación que tradicionalmente han recibido, se les llama fianzas o avales.

El nombre técnico de las garantías ofrecidas mediante seguro de caución es el de certificado de caución.

Son certificados emitidos generalmente sobre una póliza global sobre la que se pueden emitir diversas garantías hasta agotarla.

Por ejemplo, a una sociedad se le ha concedido un límite de riesgo disponible de 100.000 € y solicita un certificado de 80.000 €; en ese caso, le quedan disponibles 20.000 € que podrá completar con uno o más certificados.

En términos bancarios, el equivalente a la póliza de caución sería la línea de avales.

Operativa de la póliza de caución

Como se ha dicho, la caución ofrece garantías del contratante del seguro frente a terceros. Es un caso peculiar de seguro que se contrata para asegurar a un sujeto diferente de quien adquiere el seguro.

Ofrecer garantías significa que si la entidad garantizada no cumple con el compromiso que se le ha impuesto en su relación con el solicitante de la garantía.

¿En qué consiste la garantía? En una contraprestación económica. Si se incumplen las condiciones pactadas en el acuerdo, la entidad garantizada deberá indemnizar a la otra parte.

Ejemplo de estas garantías son las solicitadas en los concursos públicos. En este caso, a los adjudicatarios de un concurso se les exige que aporten una garantía del 5% del valor de los trabajos hasta su entrega.

Si la adjudicataria abandona la obra, o deja de prestar el servicio o suministro, depende de lo que tratara el concurso, la administración pública afectada exigirá la ejecución de la garantía a quien la aseguradora y esta deberá desembolsar la cifra correspondiente.

Posteriormente, la aseguradora tratará con su entidad cliente que habría incumplido el contrato la forma de ser resarcida del importe desembolsado.

Condiciones para disponer de un seguro de caución

Las sociedades que necesiten disponer de garantías de caución necesitan disponer de ciertos requisitos que ofrezcan fiabilidad a la aseguradora.

La sociedades deben contar con varios años de actividad, ofrecer resultados positivos y una cifra de negocio y fondos propios acordes con el volumen de garantías que se desea solicitar.

En caso de sociedades de reciente constitución, será necesario contar con el respaldo (contragarantía) que puede aportar una sociedad matriz u otra empresa consolidada muy relacionada con la solicitante, como sería el caso de empresas que comparten los mismos socios.

Ventajas de la póliza de caución

La caución ofrece la ventaja de no figurar en el CIRBE, por lo que no consume recursos financieros de la sociedad. Este es su principal valor.

Además, el alto nivel de especialización de los departamentos de caución los convierte en valiosos consultores del cliente ante dudas que puedan plantearse en pliegos de condiciones u otras cuestiones.

¿Donde emplear el seguro de caución?

Los certificados de caución pueden presentarse para acudir a concursos públicos, obtener autorización para ejercer como agencia de viaje o como empresa de seguridad, afianzar cantidades entregadas a cuenta para la compra de vivienda, obtener la licencia para punto de conexión de instalaciones de energía solar u otras renovables, recurso de sanciones y sentencias judiciales y algunas otras aplicaciones.

Avales y caución – Cómo funciona el seguro de caución