Asegurar las ventas de un cliente. Cuadro estadísticoEl hecho de asegurar las ventas a un solo cliente es posible mediante el seguro de crédito individual, tanto en el caso de riesgos nacionales como en el exterior. Ya no es necesario asegurar toda la cartera si no se desea.

Al solicitar el riesgo a la compañía aseguradora debe indicarse el total del importe asegurado, los plazos de pago y el riesgo vivo existente en cada momento; así como todos los datos que permitan identificar al cliente deudor.

La aseguradora estudiará la capacidad de conceder cobertura sobre la operación y podrá concederla total o parcialmente; o bien denegarla si considera que el deudor no tiene capacidad suficiente para responder del crédito con garantía.

Las coberturas que se ofrecen por el seguro de crédito individual alcanzan las diversas situaciones: insolvencia de hecho o de derecho (concurso de acreedores, quiebra) y riesgo país o político.

¿Cómo decidir se se debe asegurar la globalidad de las ventas de la empresa o contratar seguros puntuales individuales? En general, lo recomendable es asegurar la cartera completa de clientes, si es posible asumir el coste. En caso de carteras muy atomizadas, con una mayoría de clientes de pequeños importes, en las que no se percibe el riesgo importante de sufrir un daño serio en la economía de la empresa por algunos impagos, deben asegurarse las ventas de mayor importe a clientes puntuales.

En otros casos, en los que la empresa no ha venido asegurando las ventas, pueden comenzar a conocer el seguro de crédito asegurando algunas operaciones. Con el tiempo, es posible que se animen a asegurar toda la cartera, o bien asegurar a los principales clientes, otra posibilidad que se brinda por algunas aseguradoras.

En cualquier caso, el seguro de crédito, ya sea en sus modalidades individual, global o sobre los principales clientes, es el único mecanismo que ofrece estabilidad a la empresa mediante el aseguramiento de su circulante.

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